Marzo, las cosas entre E. y A. no van bien, se están dando un tiempo, (esa soberana estupidez para retrasar más lo inevitable) nos vamos de viaje a Valencia, uno de esos viajes universitarios de un día que haces una vez y no repites nunca. Nos vamos de viaje E. C. J. dos amigos de E. y yo. salimos a las 9 de la mañana llegamos a Valencia al medio día son fallas, hay muchísima gente en todas partes, hacemos una pequeña comprita después de comer, unas cervezas, y algo de alcohol para por la noche, muchas risas, muchas bromas, vemos quemar las fallas, estamos toda la noche dando vueltas por Valencia, hartos de los petardos, conociendo personajes de lo mas variopintos.
Tras muchas horas paseando, bebiendo, riendo y con un poquito de frío ya que son las 4 y pico de la mañana y acabamos sentados en un portal y en un banco , yo estoy en el portal con E. y me quedo dormida en su hombro, a las 6 sale nuestro autobús a Madrid. nos despertamos y vamos hacia la parada y acabamos sentados juntos, detrás de C. y J.
Empezamos a hablar sobre su relación con A. todo el mundo se está quedando dormido y nosotros seguimos hablando, yo estoy destemplada y tengo mucho frío, muy caballerosamente él me deja su chaqueta y me abraza, no lo buscamos pero entre un gracias, y un abrazo llega otro de esos besos inesperados, nos reímos no podemos hacer ruido puesto que no se puede enterar nadie, seguimos dándonos besos, en el cuello, en los labios, y así en el calor (recuperado) de los besos nos quedamos dormidos. Llegamos a Madrid nos miramos y sonreímos ¿que estamos haciendo? ¿A donde va esto? ¿que pasa con A.?
jueves, 28 de febrero de 2013
miércoles, 27 de febrero de 2013
Tímidas presentaciones
Ahora que sabéis un poco como comenzó todo esto creo que es hora de ir presentándoos un poco a los protagonistas, al menos a los que tenemos por ahora:
Repasemos:
Está E. Chico guapo, atractivo a los ojos de la mayoría de las chicas que conozco, sonrisa encantadora, buen cuerpo, y encima con ese DON, ese que tienen sólo algunas personas que hace que cuando estás con ellas te sientes bien, arropado, protegido, que te hacen reír y además sabes que no te van a fallar y que aunque algo no te guste de ellos no vas a poder echárselo en cara, así es E.
Mi mejor amiga del colegio J. fue la primera en caer a sus pies en tener la historia adolescente que hizo que yo empezase a ser amiga suya y que él se convirtiera en un imprescindible en mi vida y por supuesto en uno de mis mejores amigos.
Cómo no, estos chicos siempre tienen novia, o ligue, o novia y chica de repuesto, SIEMPRE. Pues des pues de J. vino A. y con ella estaba cuando sucedió lo de las chuches, las primeras. Entenderéis que yo no quisiera contar nada ni si quiera a J.
También tenemos al tercero en discordia C. sin duda un gran amigo, de esos que al principio no soportas pero que a medida que pasa el tiempo y que empiezas a reírte con él se vuelve inseparable, con el que estás siempre, al que le cuentas todo, ese que la gente dice que es tu novio y tu lo miras y te partes de risa pensando que es una idiotez soberana. Es inteligente, divertido, atento a su manera, te demuestra innumerables cosas de las que ni siquiera te estabas dando cuenta. En definitiva es el insustituible. No hay mas personas como él.
Pues bien, C. es además de tu mejor amigo, el ligue de tu mejor amiga de siempre de esos ligues que van y vienen, que están dos meses y lo dejan, y vuelven y así en periodos más o menos largos.
Ahora que conocéis a los protagonistas voy a seguir contándoos un poquito de la historia. Durante dos o tres meses todo se tranquilizó nos olvidamos un poco de la anécdota del coche y nuestra amistad seguía intacta.
Pero ¿qué pasa cuando se acaban los exámenes? que se empieza a salir de fiesta, a beber, y claro E.y yo habíamos terminado pero los demás todavía no, y la vuelta a casa juntos todas las noches y el hecho de que su relación con A. empezaba a hacer aguas derivó en un abrazo de más, una despedida más efusiva de lo normal, apoyarme en su hombro en el autobús y que me hiciera cosquillas, las manos se descontrolan, empiezan a rebasar los límites, los ojos se encuentran, el cuerpo pide más, el cerebro te anima diciéndote que si ya pasó una vez por qué no va a pasar otra y las boca empiezan a buscarse, una mano te retira el pelo del cuello y rápidamente una boca lo encuentra y otra boca continua hasta que vuestras bocas se encuentran, aun a riesgo de alguna mirada indiscreta que pueda haber en ese autobús.
Y la relación se va estrechando porque ambos tenéis un pequeño secreto y resulta divertida esa complicidad con tu amigo, la de 2 o 3 vueltas a casa descontroladas que acabaron en unos cuantos besos desesperados.
Repasemos:
Está E. Chico guapo, atractivo a los ojos de la mayoría de las chicas que conozco, sonrisa encantadora, buen cuerpo, y encima con ese DON, ese que tienen sólo algunas personas que hace que cuando estás con ellas te sientes bien, arropado, protegido, que te hacen reír y además sabes que no te van a fallar y que aunque algo no te guste de ellos no vas a poder echárselo en cara, así es E.
Mi mejor amiga del colegio J. fue la primera en caer a sus pies en tener la historia adolescente que hizo que yo empezase a ser amiga suya y que él se convirtiera en un imprescindible en mi vida y por supuesto en uno de mis mejores amigos.
Cómo no, estos chicos siempre tienen novia, o ligue, o novia y chica de repuesto, SIEMPRE. Pues des pues de J. vino A. y con ella estaba cuando sucedió lo de las chuches, las primeras. Entenderéis que yo no quisiera contar nada ni si quiera a J.
También tenemos al tercero en discordia C. sin duda un gran amigo, de esos que al principio no soportas pero que a medida que pasa el tiempo y que empiezas a reírte con él se vuelve inseparable, con el que estás siempre, al que le cuentas todo, ese que la gente dice que es tu novio y tu lo miras y te partes de risa pensando que es una idiotez soberana. Es inteligente, divertido, atento a su manera, te demuestra innumerables cosas de las que ni siquiera te estabas dando cuenta. En definitiva es el insustituible. No hay mas personas como él.
Pues bien, C. es además de tu mejor amigo, el ligue de tu mejor amiga de siempre de esos ligues que van y vienen, que están dos meses y lo dejan, y vuelven y así en periodos más o menos largos.
"ES UN SECRETO, NO SE LO DIGAS A NADIE"
Ahora que conocéis a los protagonistas voy a seguir contándoos un poquito de la historia. Durante dos o tres meses todo se tranquilizó nos olvidamos un poco de la anécdota del coche y nuestra amistad seguía intacta.
Pero ¿qué pasa cuando se acaban los exámenes? que se empieza a salir de fiesta, a beber, y claro E.y yo habíamos terminado pero los demás todavía no, y la vuelta a casa juntos todas las noches y el hecho de que su relación con A. empezaba a hacer aguas derivó en un abrazo de más, una despedida más efusiva de lo normal, apoyarme en su hombro en el autobús y que me hiciera cosquillas, las manos se descontrolan, empiezan a rebasar los límites, los ojos se encuentran, el cuerpo pide más, el cerebro te anima diciéndote que si ya pasó una vez por qué no va a pasar otra y las boca empiezan a buscarse, una mano te retira el pelo del cuello y rápidamente una boca lo encuentra y otra boca continua hasta que vuestras bocas se encuentran, aun a riesgo de alguna mirada indiscreta que pueda haber en ese autobús.
Y la relación se va estrechando porque ambos tenéis un pequeño secreto y resulta divertida esa complicidad con tu amigo, la de 2 o 3 vueltas a casa descontroladas que acabaron en unos cuantos besos desesperados.
martes, 26 de febrero de 2013
Por si no bastaba con uno
Por si no bastaba con uno, dos. Dos amigos, innumerables cañas, y al llegar al coche encontrar chuches, recordar la broma y empezar OTRA VEZ a hacer el gilipollas, pero esta vez, no estábamos solos, eramos 3, hacer el tonto con uno, hacer el tonto con el otro, no dejar que la idea se pase por la cabeza porque sabes que la estas liando...pero sigues buscando el limite.
Una chuche con uno, otra con el otro, una mano que se escapa, un beso en el cuello, una sonrisa cómplice que dice ¿de verdad estamos haciendo esto? otro beso en el cuello, otra chuche, y te sorprendes a ti misma regalando besos que antes te estaban robando y no a uno de tus amigos...a DOS.
Fuera del coche hace frío, estamos a finales de Octubre y la temperatura dentro está subiendo, los cristales ya están empañados, de repente por la cabeza pasa esa pregunta ¿que estoy haciendo? y seguidas empiezan a entrar, golpeando una tras otra ¿debo parar?, ¿que supone esto?, ¿se me esta yendo de las manos? y de golpe y rompiendo con las otras preguntas entra ese TENGO QUE PARARLO.
Te empiezas a poner nerviosa, miras el reloj, "uy que tarde es, me tengo que ir, buenas noches".
Te montas en el ascensor, te miras en el espejo y mandas el SMS de rigor:
"Que quede entre nosotros, ha sido divertido, Buenas noches, Os quiero"
Y sabes que no van a decir nada, uno tiene novia y te llevas bien con ella y el otro ahora no, pero es el ex de una de tus mejores amigas. Por tanto, a ellos no les interesa y a ti tampoco.
Y el día que los vuelves a ver, entrando sin avisar, aparece...ESA SONRISA CÓMPLICE
jueves, 14 de febrero de 2013
Primeras complicaciones
Todo se complica de alguna forma en algún momento de tu vida, y para mí no iba a ser menos, aunque yo puse bastante de mi parte para complicarlo, bueno no fui yo sola, también tuvo la culpa mi querido e inseparable amigo, EL ALCOHOL.
Que sucede si juntas gran cantidad de cerveza, un buen amigo y muchas risas, sin olvidarnos de las pequeñas gilipolleces como pasar un hielo con la boca, comer chuches a medias o el inigualable "venga daos un pico"
Pues al final lo que sucede es que ese pico y sin saber cómo, ni pensándolo mucho, estás en un coche liándote con uno de tus mejores amigos comiendo chuches y comprobando dónde están vuestros limites.
Os preguntareis ¿Dónde estaban? pues afortunadamente se quedó ahí la cosa, fue una bonita y muy divertida tontería que nos sirvió como despedida ya que él se iba de viaje casi un mes lo que nos dio mucho tiempo para reflexionar sobre lo que habíamos hecho y si todo podría seguir como estaba antes.
Y cómo no, intentamos guardar el secreto, que no lo supiera nadie, dijimos eso de "esto se queda aqui, ¿vale?" y yo lo creáis o no, me lo callé, me traía de cabeza no poder contarlo porque no significaba nada pero claro es mi amigo y la gente siempre tiene que opinar.
¿se guardó el secreto? obviamente, NO. Bueno no quedó entre nosotros dos, (hay gente que todavía no lo sabe) un día un amigo cuando había pasado una semana y estando con los demás en una casa de cañas y charleta, soltó una coñita que obviamente sólo entendí yo y ya me confirmó que mi amigo se lo había contado. Lo hablamos, nos reímos y poco más.
Cuándo él volvió de su viaje, nos miramos y comprendí que no tenia ninguna importancia, que sería nuestra bromita particular y que nuestra amistad no iba a cambiar. Al menos para peor.
Que sucede si juntas gran cantidad de cerveza, un buen amigo y muchas risas, sin olvidarnos de las pequeñas gilipolleces como pasar un hielo con la boca, comer chuches a medias o el inigualable "venga daos un pico"
Pues al final lo que sucede es que ese pico y sin saber cómo, ni pensándolo mucho, estás en un coche liándote con uno de tus mejores amigos comiendo chuches y comprobando dónde están vuestros limites.
Os preguntareis ¿Dónde estaban? pues afortunadamente se quedó ahí la cosa, fue una bonita y muy divertida tontería que nos sirvió como despedida ya que él se iba de viaje casi un mes lo que nos dio mucho tiempo para reflexionar sobre lo que habíamos hecho y si todo podría seguir como estaba antes.
Y cómo no, intentamos guardar el secreto, que no lo supiera nadie, dijimos eso de "esto se queda aqui, ¿vale?" y yo lo creáis o no, me lo callé, me traía de cabeza no poder contarlo porque no significaba nada pero claro es mi amigo y la gente siempre tiene que opinar.
¿se guardó el secreto? obviamente, NO. Bueno no quedó entre nosotros dos, (hay gente que todavía no lo sabe) un día un amigo cuando había pasado una semana y estando con los demás en una casa de cañas y charleta, soltó una coñita que obviamente sólo entendí yo y ya me confirmó que mi amigo se lo había contado. Lo hablamos, nos reímos y poco más.
Cuándo él volvió de su viaje, nos miramos y comprendí que no tenia ninguna importancia, que sería nuestra bromita particular y que nuestra amistad no iba a cambiar. Al menos para peor.
miércoles, 13 de febrero de 2013
Empezando por un beso
A lo largo de los años siempre he oído esa frase tan recurrida que dice que "los chicos y las chicas no pueden ser amigos". Siempre me he reído ante esa afirmación, mis mejores amigos son chicos, nunca me lo pasé tan bien con las chicas, con mis amigas, como con mis amigos. Esto no quiere decir que no tenga amigas, las tengo y muy buenas, las amigas son muy necesarias son las que te apoyan en las mas simples banalidades. las que le dan mil vueltas a un problema para no enfrentarse a él, en cambio los chicos cuando tienen un problema con un amigo lo enfrentan directamente sin dar rodeos.
Mis amigos, los mejores, son casi todos chicos. Y ahora es cuando viene esa preguntita puñetera de ¿y nunca te ha gustado ninguno? o ¿has tenido algo con alguno? pues claro que sí. También eso es inevitable, en algún momento hay alguno que te atrae o uno que te cae mejor, pero siempre he pensado que salir con un amigo es conseguir la mejor relación entre dos personas que existe, pero también supone destruir para siempre la relación que tienes, la de amigos. Esa si la destruyes nunca vuelve, nunca a ese nivel.
¿Qué pasa cuando te lías con un amigo? La primera vez que me di un beso con un buen amigo, me escandalice, le di doscientas vueltas y tenía un miedo enorme a volverle a ver. Y cuando le vi, no pasó absolutamente nada, no cambió nuestra amistad, nos reimos del tema e incluso me atrevería a decir que nuestra amistad mejoró. Despues de las diez mil vueltas que le dí, luego siempre que lo he recordado me he reído.
Y eso era simple. No era nada más que un beso. Ojala pudiera volver a ese momento en el que un beso con un amigo era un quebradero de cabeza y un problema. Porque con el paso de los años todo, todo se ha multiplicado. y nunca más ha sido un simple beso.
Mis amigos, los mejores, son casi todos chicos. Y ahora es cuando viene esa preguntita puñetera de ¿y nunca te ha gustado ninguno? o ¿has tenido algo con alguno? pues claro que sí. También eso es inevitable, en algún momento hay alguno que te atrae o uno que te cae mejor, pero siempre he pensado que salir con un amigo es conseguir la mejor relación entre dos personas que existe, pero también supone destruir para siempre la relación que tienes, la de amigos. Esa si la destruyes nunca vuelve, nunca a ese nivel.
¿Qué pasa cuando te lías con un amigo? La primera vez que me di un beso con un buen amigo, me escandalice, le di doscientas vueltas y tenía un miedo enorme a volverle a ver. Y cuando le vi, no pasó absolutamente nada, no cambió nuestra amistad, nos reimos del tema e incluso me atrevería a decir que nuestra amistad mejoró. Despues de las diez mil vueltas que le dí, luego siempre que lo he recordado me he reído.
Y eso era simple. No era nada más que un beso. Ojala pudiera volver a ese momento en el que un beso con un amigo era un quebradero de cabeza y un problema. Porque con el paso de los años todo, todo se ha multiplicado. y nunca más ha sido un simple beso.
martes, 12 de febrero de 2013
Explorando...
Explorando, así me siento y esa es la palabra que mejor describe el momento que vivo a día de hoy.
Y para no variar, estoy aquí explorando el mundo de los blogs.
La gente dice "vive el día de hoy como si fueras a morir mañana" pero es que no mueres mañana. sigues viviendo y encima tienes que vivir con las consecuencias de lo que hiciste el día anterior cuando disfrutabas del momento.
Soy experta en esas situaciones, en no pensar una cosa y actuar impulsivamente, y a la mañana siguiente martirizarme porque la he cagado y tengo un problema nuevo con el que lidiar.
He aprendido a dejar pasar el tiempo y convivir con esa situación lo mejor posible, hasta que el problema se hace pequeño y se convierte en una anécdota de la que puedes reírte El problema es que nunca sabes el tiempo que tiene que pasar para que el problema se convierta en anécdota y todo ese tiempo te lo pasas intentando no pensar, no darle más vueltas, y distrayéndote. Lo malo de distraerte es que al final el problema se hace pequeño porque la vuelves a cagar y ahora tienes un problema mayor.
Y así estoy ahora que cuando había conseguido vivir con un problema que me ha traído de cabeza, ZAS, ahora tengo otro.
Pues básicamente, esa es la función de este blog, contaros las anécdotas de mi vida que en su momento fueron problemas y los problemas actuales que algún día serán anécdotas (espero).
Bienvenidos a mi mundo.
Y para no variar, estoy aquí explorando el mundo de los blogs.
La gente dice "vive el día de hoy como si fueras a morir mañana" pero es que no mueres mañana. sigues viviendo y encima tienes que vivir con las consecuencias de lo que hiciste el día anterior cuando disfrutabas del momento.
Soy experta en esas situaciones, en no pensar una cosa y actuar impulsivamente, y a la mañana siguiente martirizarme porque la he cagado y tengo un problema nuevo con el que lidiar.
He aprendido a dejar pasar el tiempo y convivir con esa situación lo mejor posible, hasta que el problema se hace pequeño y se convierte en una anécdota de la que puedes reírte El problema es que nunca sabes el tiempo que tiene que pasar para que el problema se convierta en anécdota y todo ese tiempo te lo pasas intentando no pensar, no darle más vueltas, y distrayéndote. Lo malo de distraerte es que al final el problema se hace pequeño porque la vuelves a cagar y ahora tienes un problema mayor.
Y así estoy ahora que cuando había conseguido vivir con un problema que me ha traído de cabeza, ZAS, ahora tengo otro.
Pues básicamente, esa es la función de este blog, contaros las anécdotas de mi vida que en su momento fueron problemas y los problemas actuales que algún día serán anécdotas (espero).
Bienvenidos a mi mundo.
Suscribirse a:
Comentarios (Atom)

.jpg)
