miércoles, 13 de febrero de 2013

Empezando por un beso

A lo largo de los años siempre he oído esa frase tan recurrida que dice que "los chicos y las chicas no pueden ser amigos". Siempre me he reído ante esa afirmación, mis mejores amigos son chicos, nunca me lo pasé tan bien con las chicas, con mis amigas, como con mis amigos. Esto no quiere decir que no tenga amigas, las tengo y muy buenas, las amigas son muy necesarias son las que te apoyan en las mas simples banalidades. las que le dan mil vueltas a un problema para no enfrentarse a él, en cambio los chicos cuando tienen un problema con un amigo lo enfrentan directamente sin dar rodeos.

Mis amigos, los mejores, son casi todos chicos. Y ahora es cuando viene esa preguntita puñetera de ¿y nunca te ha gustado ninguno? o ¿has tenido algo con alguno? pues claro que sí. También eso es inevitable, en algún momento hay alguno que te atrae o uno que te cae mejor, pero siempre he pensado que salir con un amigo es conseguir la mejor relación entre dos personas que existe, pero también supone destruir para siempre la relación que tienes, la de amigos. Esa si la destruyes nunca vuelve, nunca a ese nivel.

¿Qué pasa cuando te lías con un amigo? La primera vez que me di un beso con un buen amigo, me escandalice, le di doscientas vueltas y tenía un miedo enorme a volverle a ver. Y cuando le vi, no pasó absolutamente nada, no cambió nuestra amistad, nos reimos del tema e incluso me atrevería a decir que nuestra amistad mejoró. Despues de las diez mil vueltas que le dí, luego siempre que lo he recordado me he reído.



Y eso era simple. No era nada más que un beso. Ojala pudiera volver a ese momento en el que un beso con un amigo era un quebradero de cabeza y un problema. Porque con el paso de los años todo, todo se ha multiplicado. y nunca más ha sido un simple beso.


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